Bienvenidas al blog de Amular, donde intentaremos daros información que os sirva de ayuda y orientación en este nuevo proceso.
Mi nombre es Natalia y lo primero, me gustaría que me conocierais un poquito.
Tengo 32 años, soy asturiana pero actualmente vivo en Madrid, una ciudad que siempre me ha acogido como una más. Antes de la pandemia amaba viajar a países lejanos, abrir mi mente, descubrir nuevas culturas, distintas formas de ver el mundo… Con la llegada del Covid tuve que frenar, pero este cambio me ha permitido conocer rincones de España realmente mágicos, una gastronomía deliciosa y una gente, excepcional.
Soy amante de la naturaleza y sobre todo del mar, por eso me escapo de vez en cuando a Llanes, para “respirar” un poquito de agua salada. El deporte forma parte de mi día a día, me ayuda a reorganizar mis ideas y lo considero mi momento de autocuidado.
Me encantan los animales, de hecho todo mi entorno pensaba que estudiaría para veterinaria, pero no, estudié logopedia. La parte de rehabilitación oncológica me llama desde que me inicié en el mundo de la logopedia, haciendo mi trabajo de fin de carrera sobre “el cáncer de cabeza y cuello, una apuesta por la calidad de vida”. Disfruto sintiendo que en mi día a día ayudo a que las personas tengan una vida mejor. Conocí a Isabel y a Lourdes gracias a mi trabajo y han sido uno de esos regalos que te da la vida, dos mujeres luchadoras y de una gran calidad humana, por eso cuando surgió la idea de crear esta asociación, no dude en sumarme a esta preciosa iniciativa.
Desde mi perspectiva trataré de proporcionar información que os pueda ser de utilidad y abriros un camino de luz y esperanza, ya que, tras el diagnóstico de un cáncer y los tratamientos aplicados para combatirlo, el proceso de rehabilitación tiene como fin volver a recuperar la calidad de vida, porque no todo acaba aquí, sino que empieza una nueva etapa vivida seguramente con una perspectiva diferente.
La OMS define la salud como un estado completo de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia. Y es que la salud va mucho más allá. Desde la logopedia podemos ayudar a reestablecer las consecuencias funcionales tras el tratamiento quirúrgico, de la quimio y/o la radio.
Esta es una primera entrada, general y a modo de contexto. Realizaremos más y estamos abiertas a que nos hagáis sugerencias de temas que os resulten interesantes. Nuestro fin es compartir todo aquello que os pueda servir de ayuda.
Me gustaría primero, hablaros un poquito más de la logopedia, ya que muchas veces resulta una gran desconocida para la mayoría de las personas. La logopedia es la disciplina sanitaria que se encarga del estudio, prevención, detección, evaluación, diagnóstico y tratamiento de los trastornos de la comunicación humana, las funciones asociadas y la deglución. Tradicionalmente la intervención logopédica se asocia únicamente a la adquisición de voz, pero hay más secuelas con las que podemos ayudar, como pueden ser los problemas de la disfagia (problemas al tragar), la anosmia (pérdida del olfato), el tratamiento del edema, de las cicatrices…¿sabíais todo esto? Seguramente ni os lo podíais imaginar, y como la información es poder, creo que es importante que la tengáis desde el primer momento.
Ante el diagnóstico de un cáncer de cabeza y cuello surgen muchos miedos, dudas, peguntas y sensación de incertidumbre…una de las grandes preocupaciones que asaltan al paciente y los familiares suelen ser las secuelas que quedarán tras las intervenciones y los tratamientos que se realizaran para combatirlo.
La distintos tratamientos del cáncer de cabeza y cuello pueden causar diferentes efectos secundarios, unos temporales y otros de carácter permanente. Es importante contar con equipo multidisciplinar para abordarlos todos ya que la rehabilitación tendrá un papel clave en todo el proceso de recuperación.
El cáncer de cabeza y cuello representa el 5% de todos los cánceres, y según la localización del tumor, las secuelas serán distintas, pudiendo repercutir de forma negativa en funciones importantes como: la deglución, la visión, la audición, el olfato, la respiración, el habla…. No obstante dedicaremos una entrada en el blog específica para hablar detenidamente de los tipos de cáncer más frecuentes y sus secuelas más habituales, y, como os explicaba más arriba, estas secuelas se podrán abordar con un trabajo de rehabilitación adaptado, donde es muy importante la implicación del propio paciente y su compromiso, para recuperar esa calidad de vida que nos permita seguir disfrutando,
Con esta entrada espero haber conseguido tres cosas: que me conozcáis un poquito mejor, hacer un pequeño dibujo de la logopedia y su relación con el cáncer de cabeza y cuello y daros un rayito de esperanza; espero vuestros comentarios y sugerencias para nuevas entradas.
Un sincero abrazo.
Natalia